viernes, 9 de septiembre de 2011

EL CAMINO Y EL DESTINO FINAL



Lo importante no es proyectarnos hacia el "destino final", la cuestión básica es vivir el presente en todo el trayecto, que igualmente, mucho tendrá que ver con este "destino final".  Es vivir las penas y alegrías del camino, corto o largo que uno hace.   Si realmente uno se proyecta hacia el "destino final" está elaborando un sueño, una burbuja que quizás le haga "feliz" aunque "sin tocar de pies en el suelo"  y donde, en realidad, no se están aprendiendo las verdaderas lecciones que el camino tiene reservadas a cada uno.  Y es que el camino de cada instante es la "escuela de la Vida", en donde nos encontramos con las personas, con los conflictos, donde existe oportunidad de ayudar y de pedir ayuda, donde a través de los demás, que también transitan por el camino, uno puede conocerse a si mismo, y también muchas de las razones, sino todas, que traen al ser humano a vivir en un cuerpo físico y en 3D., las experiéncias de la materia física.  Por eso es tan extraordinariamente importante el Aquí y el Ahora, porque como se ha dicho, donde se aprende, "no es pensando en el final, en la meta", sinó viviendo a fondo todo el camino, todo el trayecto que lleva hasta ella: ahora y aquí.

                                                                                  
El "cuando llegue", está ubicado en el futuro, mientras tanto lo que vale es el ahora y aquí.  Y es también a través del ahora y aquí: lo único que tiene validez práctica en el mundo tridimensional, que lo que hoy se ubica en el futuro, será una realidad objetiva y accesible para cada uno, sólo en  presente,  la única manera de conseguirlo. Lo único que lo separa momentánea y circunstancialmente, es el propio trayecto que se va haciendo de instante en instante. Es la essencia de aquél famoso poema de Antonio Machado: "Caminante no hay camino,  se hace camino al andar..." .  Y es así como en la práctica,  uno va construyendo su propia realidad,  y no hay otra manera -ahora y aquí- de conseguirlo. 
Como seamos en el "camino" así será la vida que iremos generando:  si somos generosos, la generosidad regresará a nosotros con alegría y otros buenos aspectos que llenaran nuestro vivir.  Si mandamos odio hacia álguien, este retornará a nosotros con más virulencia que nunca, con enfermedades y otros impedimentos.  Si ayudamos a los demás, no nos faltará la ayuda llegado el momento...  Si, tan sencillo como en un cuento para niños: en catalán decimos "tal faràs, tal trobaràs", es decir, "aquello que tu hagas, aquello es lo que encontrarás", es un refrán lleno de una sabiduria popular incontestable.


"Somos los propios humanos los que nos complicamos la vida": a veces eso se dice sin la profunda reflexión que merece una frase tan certera. 
Como ya se ha dicho a veces, el propio "ego subjetivo" -poco dado a reflexiones-, controla (sobretodo si estamos distraidos), actos, acciones, aparentes espontaneidades, de las que, muy fácilmente, después, habremos de arrepentirnos ...  Cuando eso sucede lo más importante es que uno se de cuenta, claro está, para corregir, para no reincidir. "Si hubiese estado "consciente" ante aquella circunstancia, mi intervención hubiese podido ser  muy distinta y las consecuencias muy otras...".   Son pequeñas o grandes lecciones para vivir el ahora, para procurar "ser conscientes de todos los actos de nuestra Vida".
Cuando se consigue "descartar" al "ego subjetivo" de la mayor parte de ciercunstancias de la vida diária, y de cada instante, quién toma las decisiones correctas y mejores "es   la propia Consciencia: es la brújula de viaje, es el equilibrio: es realmente cuando se crea una "nueva realidad", justa, equitativa, de crecimiento, donde ya no juzgamos a los demás, donde uno ya no está a merced de "mareas condicionadas", identificaciones emocionales y mecánicas, de situaciones que se rebotan o que se igualan  a quién las ha generado inconscientemente. 
Es cuando una conducta así, genera en uno mísmo, un inicio de "nueva frecuencia de vibración", es cuando realmente se da un paso hacia adelante en el crecimiento humano y espiritual, de una manera objetiva.     Y no para llenarnos de orgullo y soberbia, y mirar a nuestros semejantes por encima del hombro...   Todo lo contrario, una nueva disposición nace internamente, "compasión y comprensión cereadoras", "Amor incondicional" hacia todos los que peregrinan a nuestro lado y que, en un momento dado, se acercan, responsabilidad de más alto nivel, es la que se proyecta en la persona, y una "gigantesca humildad agradecida ante el Cosmos y la Divinidad.
Sólo con las prácticas de campo, vocalización de mantrams y ruedas magnéticas, no vamos a ninguna parte, si eso no se acompaña de un cambio real en nuestra conducta. Si todo va equilibrado, todo se complementa. Pero un aspecto no puede estar sin el otro.   Nunca podrá nadie mejorar y/o elevar su  vibración energética si no es desde la perspectiva de la Consciencia Despierta.  No se puede vibrar en la LUZ desde el "ego subjetivo" y los humanos desequilibrios que este genera...
                                                                                                                                                     

No hay comentarios:

Publicar un comentario